viernes, 28 de febrero de 2025

EL LADO OCULTO DEL ESTADO

             Los estados son malvados y tienen una parte oscura. No lo había pensado así, pero así es. Y lo hacen para poder sobrevivir como soberanía, pues de lo contrario se lo come el vecino o es conquistado por una potencia.

             No hay estado libre de culpa, ni honrado, ni decente, ni siquiera honorable, pero de eso no nos damos cuenta, preferimos ignorarlo porque entre menos sepamos mejor.

             Supongo que creerán que me emborraché en mi mala leche al mejor estilo presidencial. Mala cosa, no es así. Es algo que venía pensando desde hace rato, pero no daba cómo expresarlo.

             Así ha sido y así será, es cuestión de supervivencia y hablo de todos los estados, sin excepción, incluido el Vaticano y Suiza, por lo que el mío tampoco se escapa.

             De qué estoy hablando? De la parte oscura de un estado, de todos por igual.

             Qué tienen en común todos ellos? La policía? El ejército? Los servicios de inteligencia y contrainteligencia? Los servicios secretos? Habrá alguien que me diga un solo país que no se nutra de alguno de ellos? Son necesarios para sobrevivir, para imponer el orden, para imponer el miedo, lo sé y en cualquiera de sus variantes.

             Que estoy loco? Que ando paranoico? Tal vez. Que no es cierto? Nanay. Que menos mal que no lo sabemos o de lo que no somos conscientes conscientemente? Es un consuelo.

             Solo pensemos en Colombia. Están los de inteligencia del ejército (uno en la armada, otro en el ejército, otro en la FAC -ahora pomposamente llamado yo no sé qué cosas del ciberespacio- y el que los aúna en el estado mayor, sin olvidar la policía -con el SIPOL, antiguamente F2- y con esos ya llevamos cinco departamentos dedicados al tema. Está el Departamento Nacional de Inteligencia (antes DAS, antes SIC), la Comisión Nacional de Inteligencia, (sin mentar las comisiones de inteligencia y contrainteligencia que tiene el congreso) y no olvidemos en la Fiscalía. Y ya irían nueve organismos del estado dedicados exclusivamente al espionaje, por decirlo sin eufemismo. Y solo en un país. Ni hablar de los numerosos departamentos que tienen las potencias, basta con leer libros de espionaje.

             Siguen pensando que estoy borracho? Al mejor estilo presidencial, tirado en el piso babeando y todo en palacio? Y escribiendo estupideces a las tres de la mañana? Solo preguntaba.

             Y no diré nada de los métodos que utilizan, quien ha leído novelas de espionaje lo sabrán y habrán sacado sus conclusiones y por eso no hay nada que agregar, pero son especialistas en buscar la “verdad” y con Maquiavelo, el fin justifica los medios. Y ni me quiero imaginar tales servicios de las dictaduras.

             Y una lectura me dio la respuesta para lo que pensaba:

 Frank se da cuenta de que ha matado a más hombres para el Estado que para la mafia. «Y hasta me condecoraron y me dieron de baja con honores». Frank se cargó a un montón de vietcongs y soldados del ejército norvietnamita durante el período que estuvo en Vietnam. En eso consistía su trabajo: era francotirador y lo hacía de puta madre. Algunas veces sentía que no estaba bien, pero jamás se sintió culpable por eso. Ellos eran soldados, él era soldado y en la guerra los soldados se matan entre sí.[1]

             No hay nada más que agregar, sigan durmiendo tranquilos. 

A esto se añadía que Alania ya no estaba acostumbrado a la vida en el socialismo. La severa vigilancia, la sospecha constante, el descontento entre los colegas, la tristeza cotidiana, todo eso le golpeó rápidamente el ánimo.[2]

Tomado de Facebook
477499287_2043569052788076_3636800487831074146_n


[1]  El invierno de Frankie Machine. Don Wislow.

[2] La octava vida (para Brilka) - Nino Haratischwili.


miércoles, 26 de febrero de 2025

SE PUEDEN RECICLAR LOS PENSAMIENTOS?

             Una retórica pregunta. Se me vinieron a la cabeza varios pensamientos, en tropel, claro está y eso hizo que repensara la pregunta.

             Una de ellas, me imaginé asimilándola a la terquedad. Dele que dele el mismo pensamiento, generalmente abrazador y la misma respuesta como si no hubiera otra opción, de allí la similitud con la terquedad. Ese dale que dale como canción que se entroniza sin posibilidad de dejarla ir, dale que dale sin saber por qué carajos se quedó ahí, obstinadamente, sin quererse ir, voluntariamente.

             Hago entonces un pare. Qué es el reciclaje o qué significa reciclar[1] y toda su significancia lo lleva a su sinónimo: basura. Supongo que es porque es lo que ahora se acostumbra, para estar a la moda, no por íntima convicción. Cosas que se me ocurren.

             Entonces reciclar es, en la voz de la academia, el proceso de transformación de desechos a nuevos productos que permiten la reutilización.

             Así visto, es convertir basura en un nuevo producto. Entonces me preguntaba si el pensamiento se podía reciclar. Pero pensaría uno ante todo que tendría que tener pensamientos basura, inútiles, desechables. Y pensamientos inútiles es lo que más tenemos, valdría la pena reciclarlos en pensamientos productivos, mejor que dejarlos en el basurero (y eso me lleva a otra pregunta adicional, igualmente retórica, en dónde se almacena la basura del pensamiento? Que por ser retórica es mejor dejarla quieta, por el momento). Y eso me lleva al inicio, a la terquedad, somos tan tercos que nos da por no desecharlos, mantenerlos, mantener en una palabra la inutilidad.

             Y habría que ver si se trata de pensamientos propios o adquiridos -de conocimiento, me preciso-, pues en ambos casos hay mucha utilidad (o inutilidad, si se quiere). Por ejemplo, de qué me sirve hoy saber que Bolívar ganó la batalla de Bomboná en 1822, si ni siquiera recordaba el año y menos en dónde quedaba el pueblo ese, si he de reconocer mi olvido. De cultura general, me dirá alguien; otro dirá que el que no conoce la historia está condenado a revivirla y me preguntaba cuándo será eso, si habrá otra Bomboná, si será pronto, si debo conocer la estrategia usada por Bolívar, dos siglos después y si seré yo el comandante, pues de lo contrario, para nada me ha de servir. Estos sí que son pensamientos inútiles y no vale el reciclaje, me digo.

             Más bien dejemos la terquedad y pensamos en a mí qué carajos me importa si los pensamientos pueden reciclarse y como para qué. Algunos pensarán en que les hice perder el tiempo leyendo estas letras. Era para demostrar tercamente que existen pensamientos inútiles, los más, que pueden reciclarse en una buena o mala lectura, me defiendo. 

¡seguro, segurísimo, Brilka, porque el primer beso de nuestra historia tiene que ser bello a toda costa.[2] 

Tomado de Facebook
474778789_3070387076444878_6902060603893534214_n



[1] tr. Someter un material usado a un proceso para que se pueda volver a utilizar. Sin.: regenerar. tr. Tecnol. Someter repetidamente una materia a un mismo ciclo, para ampliar o incrementar los efectos de este. RAE.

 [2] La octava vida (para Brilka) - Nino Haratischwili.

lunes, 24 de febrero de 2025

EL MUNDO SE ACHICÓ

             Una frase al vuelo que oí viendo a House. La frase no tiene nada de raro, intrascendente si se quiere, se mire desde donde se mire.

 

            Qué tiene de raro entonces la frase? Nada. Pero mi impertinente mente hizo que se disparara mi imaginación.

 

            Primero me vino a la cabeza el parroquialismo citadino de antaño, las cuatro esquinas que delimitaban la ahora ciudad. Los chismes eran los de la cuadra, del barrio, de la ciudad y con la radio, los del país. Provincianos que éramos. O si se prefiere, éramos unos parroquianos.

 

            La ciencia avanzó, no tan rápido como pidiéramos querer, eran otras épocas. Las carreteras se fueron volviendo autopistas, nos acercaron más y con los vecinos también, todo para poder compartir chismes más frescos.

 

            Y entonces aparece la tecnología, que he decirlo, nos arrasó, inicialmente dando un tímido paso y al ver que podía caminar, dio un salto gigantesco que hizo que el mundo se achicara. Ya no dependíamos que el chisme llegara a nuestros oídos, ya lo veíamos en vivo y en directo y así pudimos corroborar que el mundo se había achicado, sin darnos cuenta.

 

Una resignada melancolía se instaló en el alma de sus ciudadanos más clarividentes: «El mundo —escribe Cipriano de Cartago— ha entrado ya en su senectud, pues la decadencia de las cosas prueba que se aproxima a su ocaso. En invierno no llueve lo suficiente para que grane la cosecha; el verano no calienta para granar la espiga. Las montañas, exhaustas, producen menos mármol; las minas, agotadas, dan menos metales. Faltan campesinos en los campos, marinos en el mar y soldados en los campamentos. Faltan magistrados justos, artesanos diestros, disciplina y buenas costumbres.» [1]

Tomada de Facebook
474623613_615753120836516_2742737398928027733_n


[1] La historia del mundo contada para escépticos. Juan Eslava Galán.


viernes, 21 de febrero de 2025

INSULSO

             Será que me estoy volviendo insulso[1], soso[2], desabrido[3]?

             Esa fue la sensación al despertar algún día. Y cosa curiosa fue un dormitar entre siete u ocho horas seguidas, lo que no es muy común en mí. Y más curioso fue que en el sueño no pasó nada.

             Porque, que lo recuerde yo, en esa noche no pasó nada, y me explico un poco más. Dormí, soñé, pero en el sueño no pasó nada, absolutamente nada, fue como ir al cine y estar frente a una pantalla mostrando cualquier imagen campestre, la misma imagen durante horas, un mismo paisaje, una y otra vez, una y otra vez y al final darse cuenta de que no pasó nada, que se perdió el tiempo, que el tiempo pasó y no pasó nada, absolutamente nada, pensando que al menos en una vida rutinaria algo pasaba, pero en este sueño, nada de nada.

             Por Dios, mucha pérdida de tiempo, sin sentido, desabrido, inútil, haciéndome sentir igualmente inútil, sin futuro, sin presente. En una palabra deprimente.

             Ahí me di cuenta de que a pesar de tener una vida rutinaria, al menos ésta tenía movimiento y por eso no debía ser desagradecido, porque uno podía ser de todo, menos insulso. 

Si alejas el futuro no te queda más remedio que ceñirte al presente.[4]

Tomado de Facebook
473741343_9378699995494400_1232676807388206975_n


[1] Insípido. Falto de gracia y viveza, enseña el DRA.

[2] Que no tiene sal o poca.

[3] Que carece de gusto, o apenas lo tiene, o lo tiene malo.

[4] Por encima de la lluvia. Víctor del Árbol Romero.


miércoles, 19 de febrero de 2025

EN SOLEDAD

             Una frase tomada al vuelo. La muerte es un acto solitario, creo que oí. Si he de ser sincero, la frase me quedó sonando; raro, dirá alguien.

 

            Pues así fue. La muerte es realmente un acto solitario, a pesar de que ocurra en medio de una catástrofe y no sea el único. Es personal para el afectado y es un acto solitario, así se esté en compañía.

 

            Me acuerdo de una conversación entre mi mamá y una de sus hermanas, ya viejas y supongo que la primera previendo que ya se le iba acabando el tiempo en este mundo. En medio de la conversación casual, estando yo presente, mi mamá le dijo a la tía: Ve, porque no te morís conmigo? Y mi tía soltó la carcajada, no recuerdo las palabras textuales, pero le dijo algo así: Ve ésta (con el acento propio de los ocañeros), yo soy muy feliz viviendo, déjate de bobadas, por qué habría de morirme yo con vos?

 

            Así comprendí que la muerte es un acto solitario y personal.

 

Últimamente fantaseaba con su propio entierro, quién estaría presente, qué cosas dirían sobre él. Si somos la huella que dejamos en los demás, la suya se borraría con facilidad.[1]

FOTO JHB




[1] Nadie en esta tierra. Víctor del Árbol Romero.


lunes, 17 de febrero de 2025

MEME QUE TRANSPORTA AL RECUERDO

             Viendo un meme que ilustraba la pregunta incómoda que me hacían en el colegio, durante mi infancia, en que luego de una exposición el profesor pedía que resumiera lo que había entendido del tema, me retrotrajo a esos momentos que daban pánico en el colegio y en la universidad.

 

            Preguntas triviales que no dejaban de ser incómodas y que automáticamente dejaban en blanco la mente y lo hacían a uno ver como un total ignorante, quedaba uno humillado, los colores afloraban a la cara y ponía uno una cara que los demás deberían ver como la de un estúpido.

Ahí es cuando uno comienza a saber lo que es la infelicidad.


Y los medios de presión durante los exámenes. Pasa el profesor mira lo que uno está haciendo y da dos pasos adelante y dice: lean bien las preguntas. Uno no sabe si es advertencia para uno o para el de adelante y la duda hace su aparición, maldita duda.


Y el momento trágico cuando se inicia el examen, mira uno las preguntas y lee una tras otra y se da cuenta uno que no tiene ni la más remota idea de ninguna de las respuestas y el miedo se apodera de uno y piensa para sí: comeme tierra.


Pero eso sí, la dignidad es la dignidad y ni por el putas uno podía dejar en blanco el examen, había que responder así fuera con evasivas.

Y entre las evasivas cómo no acudir al etcétera que abarcaba tanto lo largo como lo ancho, pues ancha es Castilla.



O el otro momento de sonrojada, cuando uno acertaba a la respuesta pero adicionalmente le pedían a uno que explicara cómo había llegado ahí. Pues con mucho esfuerzo, me digo ahora.



Y recordar a la salida del examen, cuando se reúnen los que ya han salido y van verificando las respuestas y uno se da cuenta que no sabe si alcanza a pasar o no, por la dualidad de comentarios que uno oye. Otra vergüenza adicional de la que solo queda el comentario común: No marica, creo que no paso o creo que paso raspando, que era un ruego a los cielos para que no perdiera la materia, poniendo toda la fe para que no sucediera una catástrofe.


Y la última, preguntarle al profesor cómo le había ido en el examen. Esa sí era de campeonato porque la duda quedaba hasta la entrega de notas, era todo un parto.


Y todo esto para ver cómo se sufrió en el colegio y en la universidad, no todo fue gratis, las angustias tenían sus fechas. Sufridos recuerdos que hoy me hacen reír.

 





































viernes, 14 de febrero de 2025

AUTO DE FE

             La vida es un constante acto de fe (nótese que señalé en el título auto de fe, diferencia que hace esta sea imposición religiosa y la otra una creencia relativamente impuesta, me digo). Y nada qué ver con lo religioso, pues en este tema las dudas son múltiples a pesar de ser un auto.

 Pero lo curioso es que en la vida real es un verdadero acto de fe lo que a diario hacemos, sin saberlo, sin notarlo, pero resultan ser verdaderos actos de fe.

             Pongamos ejemplos: La pastilla para el dolor de cabeza nos la tomamos sin preguntarnos si lo que tomamos es lo que dice ser la etiqueta. Al tomar una proteína para los músculos (los viejitos añadimos este suplemento, porque viejitos somos). Decía que al tomar el suplemento me preguntaba si el polvito ese con sabor a vainilla, a malteada para ser más precisos, era lo que era y servía para lo que dicen que sirve. Un acto de fe.

             Y a partir de esa reflexión -alguien dirá que más que reflexión es una pregunta retórica, pues que así sea-. Decía que a partir de ese pensamiento giramos alrededor de los actos de fe, sin mayor cuestionamiento y lo hacemos constantemente, día a día.

 Nos subimos a un taxi y aceptamos que el taxista, por más malencarado que sea, no es un ladrón, no nos va a hacer daño y nos llevará tranquilamente a nuestro destino. Almorzamos en un restaurante cualquiera y no pensamos si cumplen las medidas sanitarias mínimas. Otro acto de fe.

 El vecino que nos da las vueltas del mercado, generalmente no dudamos si nos está metiendo gato por liebre. Otro acto de fe.

 Que la gasolina con que tanqueamos es la correcta, tiene los componentes anunciados, la cantidad requerida y es la que es. Otro acto de fe.

 Que cuando nos dicen que nos quieren, así dicho es otro acto de fe.

 Un acto de fe que diariamente se acepta sin discusión, una fe firme, sin duda alguna, como auto de fe.

 Lo curioso es que tratándose de la fe religiosa, esa otra cosa, a eso no le tenemos fe, no le hacemos acto de fe.

 Así somos los humanos, incomprensibles hasta en estas cuestiones. 

Ser ker, estar feliz, significa estar satisfecho con uno mismo y con su situación, lo que le llevaría probablemente a desentenderse de los demás.[1] 

Tomado de Facebook
474595641_3881428435430663_186631512518602012_n


[1] Pensamiento Ifaluk, tribu de las islas Carolinas.


miércoles, 12 de febrero de 2025

EL TAL COPILOT

 Andaba totalmente desocupado y no podía moverme del sitio por aquellas cuestiones domésticas en las que es mejor quedarse quieto en primera con el fin de evitar mayores peligros de convivencia (es decir, habían trapeado el piso).

 Y así debía estar unos cuantos minutos y ante el computador no sabía qué hacer, ya había agotado redes sociales, correos y definitivamente no veía ningún horizonte halagüeño. Entonces vi el botoncito de colorcitos y recordé que era la ayuda de inteligencia artificial que ahora hace parte de los computadores y dentro de poco de nuestra vida. Entonces, me dije, por qué no probar esa cosiaca? Y la abrí y le pregunté: QUE PUEDO ESCRIBIR? (Antes de proseguir, advierto que se puede leer la primera respuesta, las subsiguientes se pueden omitir si se quiere llegar al final, pues son tan desilusionantes que ni siquiera vale la pena leerlas, las dejo solo para demostrar que hice el ejercicio y entre salto y salto está nuestra conversación, insulsa por demás).

Puedes escribir sobre muchas cosas dependiendo de lo que necesites o lo que te interese. Aquí tienes algunas ideas:

1.       Diario Personal: Reflexiona sobre tu día, tus pensamientos, sentimientos, y experiencias.

2.       Historia Corta: Crea un pequeño relato, ya sea de ficción o basado en algo real que te haya sucedido.

3.       Ensayo: Puedes escribir un ensayo sobre un tema que te apasione o que sea relevante para ti.

4.       Poema: Expresa tus emociones a través de la poesía.

5.       Carta: Escribe una carta a un amigo, familiar, o incluso a ti mismo en el futuro.

6.       Artículo: Investiga y escribe sobre un tema de actualidad o de interés general.

7.       Plan o Lista: Haz una lista de metas, tareas o cosas que te gustaría hacer.

¿Qué te gustaría escribir hoy? 🚀 Le respondí, sin mucho interés: CARTA PARA MI PARA DENTRO DE UNOS AÑOS. Me respondió:

¡Claro! Aquí tienes una carta que podrías escribirte a ti mismo para dentro de unos años:

Querido yo del futuro,

Espero que cuando leas esta carta, te encuentres lleno de felicidad y satisfacción. Hoy, mientras escribo estas líneas, estoy reflexionando sobre dónde me encuentro y hacia dónde me dirijo. Quiero compartir contigo algunos pensamientos y deseos que tengo en este momento.

Primero que todo, quiero felicitarte por todos los logros que has alcanzado hasta ahora. Sé que has trabajado duro y has enfrentado desafíos con valentía y determinación. No importa cuán difíciles hayan sido los momentos, siempre encontraste la manera de seguir adelante.

Te animo a que nunca pierdas de vista tus sueños y metas. Recuerda siempre la pasión y el entusiasmo que te impulsaron a comenzar este viaje. Mantén viva esa chispa y sigue persiguiendo aquello que te hace feliz.

Espero que hayas seguido rodeándote de personas que te aman y te apoyan. La familia y los amigos son un pilar fundamental en nuestras vidas, y estoy seguro de que has cultivado relaciones valiosas y significativas.

También quiero recordarte la importancia de cuidar de ti mismo. La salud física y mental es esencial para vivir una vida plena. No olvides tomarte el tiempo necesario para descansar, relajarte y disfrutar de las pequeñas cosas que te hacen sonreír.

Por último, te deseo mucha paz y serenidad. Que encuentres equilibrio en todas las áreas de tu vida y que siempre te sientas agradecido por las experiencias y oportunidades que has tenido.

Con mucho cariño y esperanza,

Tu yo del pasado

¿Te gustaría agregar algo más a esta carta? 😊

 A decir verdad, no me agradó mucho ese estilo, por eso le dije: QUE NO FUERA TAN MENTIROSA.

¡Entiendo! Vamos a hacer una versión más realista de la carta:

Querido yo del futuro,

Espero que al leer esta carta, te encuentres en un buen momento de tu vida. Hoy, desde el presente, quiero hablarte con sinceridad sobre mis pensamientos y esperanzas.

Sé que la vida no siempre es fácil y que has tenido que enfrentar muchas dificultades. A veces te has sentido perdido y has tenido que superar momentos de duda y temor. Pero quiero que sepas que cada uno de esos momentos te ha ayudado a crecer y aprender. Espero que sigas recordando la importancia de la perseverancia y de seguir adelante, incluso cuando las cosas se pongan difíciles.

Quiero que recuerdes los sueños y metas que tenías en este momento. Puede que algunas hayan cambiado y otras quizás no se hayan cumplido, y eso está bien. La vida tiene su propio ritmo y es importante adaptarse y encontrar nuevas oportunidades.

Espero que hayas seguido rodeándote de personas que te quieren y te apoyan. A lo largo del camino, seguramente has hecho nuevos amigos y has fortalecido relaciones. La compañía y el apoyo de los demás son esenciales para nuestra felicidad.

Cuida de ti mismo, tanto física como mentalmente. A veces es fácil olvidar lo importante que es el autocuidado, pero espero que sigas priorizando tu bienestar. No olvides tomarte un tiempo para ti, relajarte y disfrutar de las cosas simples que te hacen feliz.

Por último, quiero que sepas que estoy orgulloso de ti. No importa cuántos errores hayas cometido o cuántas veces te hayas caído, lo importante es que siempre te has levantado y has seguido adelante.

Con cariño y sinceridad,

Tu yo del pasado

¿Qué te parece esta versión? 😊

 Defraudado empecé a sentirme, pues al leerla es cosa que claramente no escribiría de mí para mí. Por eso añadí: NO DE AUTOAYUDA.

Entiendo, aquí tienes una carta más casual y sin tono de autoayuda:

Querido yo del futuro,

¡Hola! Es raro pensar en el futuro y en cómo estarás dentro de unos años. Hoy, estoy escribiendo esta carta para que recuerdes algunos momentos y pensamientos de esta época.

Primero que todo, quiero decirte que espero que hayas tenido muchas experiencias interesantes y divertidas desde que escribí esto. La vida a veces puede ser un poco monótona, así que espero que hayas encontrado formas de mantenerla emocionante.

Recuerda algunos de los sueños y planes que tenías. Puede que algunos se hayan hecho realidad y otros no. Y eso está bien. La vida cambia, y nosotros cambiamos con ella.

Ojalá sigas en contacto con esas personas especiales que hacen que todo valga la pena. Los amigos y la familia son un pilar importante, y sé que has valorado mucho esas relaciones.

Espero que sigas encontrando tiempo para tus hobbies y cosas que te gustan. Ya sea leer, cocinar, hacer ejercicio o simplemente disfrutar de una buena película, esas pequeñas cosas hacen que la vida sea más llevadera.

Finalmente, quiero que sepas que, sin importar cómo hayan ido las cosas, estoy orgulloso de ti. La vida puede ser impredecible y llena de giros, pero confío en que has navegado por todo eso con la mejor actitud posible.

Hasta pronto,

Tu yo del pasado

 Me pareció estar leyendo el horóscopo en cualquier periódico, en los que creen decir algo, sin decir algo, aplicable a cualquier tarado que quiera leerlo, porque aplica a todos (de acuario a capricornio) y a ninguno al mismo tiempo. Por eso insistí: ALGO MAS REALISTA.

Entendido, aquí tienes una carta más realista y casual:

Querido yo del futuro,

Hola. Espero que todo vaya bien por allí, en el futuro. No estoy seguro de cómo han cambiado las cosas desde que escribí esta carta, pero quiero aprovechar para recordar algunos momentos y pensamientos de hoy.

Actualmente, la vida está llena de altibajos. Hay días buenos y días malos, y estoy seguro de que eso no ha cambiado mucho. Hay momentos en los que todo parece ir bien, y otros en los que las cosas se ponen difíciles. Pero así es la vida, y de alguna manera siempre encontramos la forma de seguir adelante.

Probablemente hayas experimentado algunos logros y también algunos fracasos. Y eso está bien. Los fracasos son parte del proceso y nos ayudan a aprender y crecer. Solo quiero recordarte que cada experiencia, buena o mala, es una oportunidad para aprender algo nuevo.

En cuanto a las personas en nuestra vida, espero que hayas mantenido esas amistades y relaciones que son importantes para ti. Las relaciones pueden cambiar con el tiempo, pero los buenos amigos siempre encuentran la manera de estar presentes de alguna forma.

También espero que sigas dedicando tiempo a las cosas que te gustan y te hacen feliz. A veces es fácil olvidar nuestras pasiones y hobbies en medio de las responsabilidades diarias, pero es importante no perder de vista lo que nos hace sentir vivos.

Finalmente, quiero recordarte que no pasa nada si las cosas no siempre salen según lo planeado. La vida está llena de sorpresas y giros inesperados. Lo importante es adaptarse y seguir adelante con una actitud positiva.

Un abrazo desde el pasado,

Tu yo del presente

 Leyendo cada una de las propuestas, veo que en el fondo dicen la misma basura, ando bien, algunos tropezones, la vida es una sorpresa y además azarosa, qué bien, esa carta ya parece que fue escrita para cualquiera y ninguna de ellas dice nada ni vaticinan tampoco nada de mí, de lo que soy o de lo que quiero. Por eso insistí: QUE LAS VERSIONES NO SEAN TAN IGUALES

Claro, aquí tienes una carta más diferente y realista:

Querido yo del futuro,

¿Qué tal? Me pregunto cómo estarán las cosas en tu vida en este momento. La vida aquí en el presente es un poco caótica. Algunas cosas van bien, otras no tanto, pero eso ya lo sabes.

Quiero hablarte de algunos momentos clave que estoy viviendo ahora. Este año ha sido una montaña rusa. Ha habido momentos geniales, como cuando logramos ese proyecto en el trabajo que parecía imposible, y momentos difíciles, como cuando todo se complicó más de lo esperado.

Espero que hayas logrado mantener el equilibrio entre el trabajo y la vida personal. Sé que puede ser difícil, pero es importante disfrutar de las pequeñas cosas: un buen libro, una tarde con amigos, o simplemente un momento de tranquilidad.

También me pregunto si sigues en contacto con las personas que son importantes para ti. Las relaciones cambian con el tiempo, pero espero que mantengas cerca a aquellos que realmente te importan.

Y por favor, cuídate. A veces descuidamos nuestra salud por estar ocupados, pero es crucial prestar atención a nuestro bienestar. No te olvides de hacer ejercicio, comer bien y descansar.

Finalmente, quiero que sepas que no importa qué tan difícil sea el camino, siempre encontrarás la forma de seguir adelante. La vida está llena de retos, pero también de momentos gratificantes.

Un abrazo fuerte desde el presente,

Tu yo del pasado

 

Perdí el año, con esa estupidez de cuídate, ya todo quedaba claro, la inteligencia artificial era tan estúpida como yo, perdiendo el tiempo en nimiedades, definitivamente era como el horóscopo diario que hay en los periódicos, no dicen nada tratando de decir todo, aplicable a nadie pero que le caiga a todos. Menos mal que no le pedí expresar mis emociones a través de la poesía, porque creo que hubiera terminado suicidado. Ya sé, muchos dirán que es que el copiloto no me conoce, pero de ponerme a intimar con un programa se ve como obsceno, me digo, por ahora dejémoslo así, que él se ponga a averiguar sobre mí y cuando esté preparado me avise, o no sirve para eso la inteligencia artificial?[1]

 Quedo atento, cuídate y un abrazo fuerte desde el pasado, tu yo de hoy! (Marica!) fue lo último que se me ocurrió escribir después de perder el tiempo en estas maricadas, pero… cosas de viejitos! 

Si alejas el futuro no te queda más remedio que ceñirte al presente.[2]

Tomado de Facebook
474595641_3881428435430663_186631512518602012_n



[1] Por eso, a manera de despedida le dije: estoy defraudado. Y el hijuemadre atrevido me contestó: Lo siento mucho si la carta no cumplió con tus expectativas. Mi intención es siempre ayudarte de la mejor manera posible. A veces, encontrar las palabras adecuadas puede ser un desafío, incluso para mí. Dime, ¿hay algo específico que te gustaría incluir en la carta o algún enfoque diferente que prefieras? Estoy aquí para ajustar y mejorar el contenido hasta que se ajuste a lo que necesitas. 😊. Por lo que le señalé: si, los sentimientos de un suicida. Lo siento, pero no puedo ayudarte con ese tema. Si estás pasando por un momento difícil, te recomiendo que busques ayuda profesional o hables con alguien de confianza. Tu bienestar es muy importante. Si necesitas hablar con alguien de inmediato, por favor contacta a un servicio de emergencia o una línea de ayuda en tu país. Aquí en Colombia, puedes llamar a la Línea Nacional de Prevención del Suicidio al 192. Por favor, cuídate.. Jajaja, esa sí que estuvo buena, al menos me alegró lo que quedaba de tarde.

 

[2] Por encima de la lluvia. Víctor del Árbol Romero.

lunes, 10 de febrero de 2025

INDIAS PA’ BUENAS

             Vea pues, un chisme que sirve de entremés al haberme prometido no meterme con temas inapropiados, pero chisme es chisme y ahora que están tan de moda los inmigrantes, nacionales que se creen tan autóctonos, esta lectura me cae como caída del cielo, porque resulta ser un buen chisme si no de ilustración, al menos para que se conozcan raíces, que muchas veces se quieren ocultar.

 

Las enfermedades europeas redujeron notablemente la población india en un primer momento pero, en compensación, el intenso mestizaje contribuyó a reforzar genéticamente a los que sobrevivieron.

Los españoles se entregaron de buena gana a la labor de fecundar a las indias, cuya inocente impudicia los excitaba: «Hay muy lindos cuerpos de mujeres —escribe el propio Colón— […] van desnudos todos, hombres y mujeres, como sus madres los parieron. Verdad es que las mujeres traen una cosa de algodón solamente tan grande que les cobija su natura y no más y son ellas de muy buen acatamiento, ni muy negras, salvo menos que las canarias.»

 Pedro Hernández añade: «Las indias de costumbre no son escasas de sus personas y tienen por gran afrenta negarlo a nadie que se lo pida y dicen que para qué se lo dieron sino para aquello.» Orellana: «Las indias son lujuriosísimas.» Gonzalo Fernández de Oviedo: «El español que no tenía ocho o diez es porque no podía […]. Son tan estrechas mujeres que con pena de los varones consuman sus apetitos y las que no han parido están casi que parecen vírgenes», ingieren abortivos «para no preñarse para que no pariendo no se les aflojen las tetas, de las cuales mucho se precian y las tienen muy buenas». López de Gómara: «Si el novio es cacique, todos los caciques convidados prueban la novia antes que él; si mercader, los mercaderes, y si labrador, el señor o algún sacerdote. Cuando todos la han catado antes de la boda, la novia queda por muy esforzada […] pero al regusto de las bodas disponen de sus personas como quieren o porque son los maridos sodomíticos.»

Menudo panorama, ¿no? La intensa actividad genésica de los españoles produjo millones de mulatos, lo que explica el mestizaje que hoy observamos en aquellas tierras. Paraguay fue conocido como «el paraíso de Mahoma» en alusión a los concurridos harenes que disfrutaban sus colonos. No hay que tomar al pie de la letra, por lo tanto, lo de que «los mexicanos descienden de los aztecas, los peruanos de los incas y los argentinos de los barcos».[1] 

 Vea pues de lo que uno se entera, vea pues. Y pensar que están hablando de nuestras tatarabuelas!



[1] CAPÍTULO 78. Mujeres de buen acatamiento. Historia del mundo contada para escépticos. Juan Eslava Galán.



Tomado de Facebook
391744108_861811421963600_3379367980732773072_n