Por
estar procrastinando sobre un tema, mi atención se desvió, como es lo natural
en mí y terminé en otro lugar de la profundidad del internet y me encontré una
frase que me dejó boquiabierto:
El hombre no piensa palabras, pero
tampoco podría pensar sin ellas. De boca de Miguel de Unamuno.
Frase
precisa para mí, que me encanta hablar y pontificar sobre los temas en los que
no soy docto, como una forma de enfrentarme a mí mismo, viendo dos perspectivas
diferentes –la mía y la de ese que tampoco sabe pero que está dentro de mí y
que le gusta pasar el rato en cualquier pendejada, antes que aburrirse-.
Volviendo
a la frase, efectivamente quedé sin palabras. Tal vez alguna vez lo había
pensado, tal vez lo había dicho en otro blog relacionado con los sueños.
Traté
de visualizar mi pensamiento en ese momento, traté de ver palabras, pero no, no
existían y no pude explicármelo, como lego que soy. Entonces miré a mi
alrededor, vi un computador, un mouse, unos parlantes, un calendario, unos
libros, pinturas, todo eso lo vi, pero no vi palabras, solo vi imágenes que por
sí mismas me decían lo que eran, sin explicación, tampoco sin ser necesarias
porque ellas mismas lo decían todo, se identificaban, se expresaban, aún sin
palabras.
Pero
al darles vida en mi mundo, cada una pareciera que hubiera alzado los brazos
con un letrero explicativo: computador, mouse, parlante, calendario, libro,
pintura, unas en singular y otras en plural, según fueran únicos o múltiples.
Allí surgieron entonces las palabras.
Y
el pensamiento, me dirán, tal como me lo pregunto ahora. Un mundo de imágenes?
Tampoco, porque eso fue lo que vieron mis ojos, imágenes iniciales, mas no
pensamientos y qué difícil diferenciarlos y aún más difícil explicarme. Y para
colmo de males me pregunté: el pensamiento puede estar basado en imágenes
aprendidas, lo que me lleva al letrero explicativo que cité. Pero una frase que
contiene artículo, sustantivo, adjetivo, verbo como lo verá el pensamiento o
mejor, cómo lo expresará si no hay propiamente una imagen, como por ejemplo,
cómo será la imagen de un adverbio o de una preposición?
Pero
si el pensamiento es un proceso químico, de electricidad, me oí decir, cómo
pretende plasmarlo en palabras o en imágenes, con lo difícil que es pensar
pensamientos, como dijera una sobrina en los albores de su infancia.
Un
laberinto al que no debí meterme, pero que curiosidad sí que me dejó.
Y
a propósito, indagando en el tema, a vuelo de pájaro me encontré en internet(1) un
comentario a la pregunta que podría responderme, aunque me deje el sinsabor de
no tener una mejor respuesta más complaciente:
Oscar Amezcua, Estudios en Lógica
Respondió 21 May. 2018 · El autor tiene 1,1k respuestas y 188,9k vistas
de respuestas
Respondido inicialmente: ¿Es posible pensar sin palabaras? (sic)
La mayoría de los pensamientos son sin palabras. Los
sentimientos son comunicación sin palabras, luego la gente los traduce a un
lenguaje de palabras, pero ellos son el lenguaje universal.
Los sueños que soñamos al dormir, la mayoría son sin
palabras, aunque algunos contienen palabras, la mayoría de la comunicación es
audio-visual y emocional.
La gente se acostumbra a las palabras, pero la mayor
parte del pensamiento es sin palabras.
Para
concluir, por ahora, qué mejor que esta cita:
—Para el cerebro humano, cualquier respuesta es mejor que ninguna.
Sentimos un tremendo desasosiego cuando nos encontramos ante «datos
insuficientes», de modo que el cerebro los inventa para ofrecernos al menos una
ilusión de orden mediante una miríada de filosofías, mitologías y religiones
que nos aseguran que existe orden y estructura en el mundo(2).
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