La noche genera duda.
La oscuridad siembra
temores.(1)
La tecnología, incluida la inteligencia artificial,
nos ha puesto en un punto en que creemos que terminaremos paranoicos, al menos
a los viejos que pensábamos que no se iba a progresar tanto y tan rápido.
La foto publicada en blog anterior (del aviso de que por mi seguridad una cámara me vigilaba las 24 horas), tomada en un
conjunto residencial, fue el detonante que me llevó a pensar en que de
cualquier manera somos investigados, espiados o monitoreados en el paso a paso
mientras estamos fuera de casa.
Y con las sutilezas en el manejo del lenguaje, me
advierten que es por mi seguridad y para mi intranquilidad me señalan que son
las 24 horas, ni que viviera con ellos! Por mi seguridad o por la de los que
allí viven? El traslado de una responsabilidad imaginada no es una
irresponsabilidad? Pero la sutileza del lenguaje hace que uno sea más o menos
responsable, como podrá comprobarse.
Y siendo más paranoico, de serlo, claro está, uno
llega a pensar en que aún desde su propia casa es monitoreado, seguido,
investigado y perseguido hasta por los servicios de inteligencia, antes
llamados de espionaje –sutilezas idiomáticas-, rusos, gringos, colombianos o
iraníes. Y adicionalmente por los hackers que se empeñan en meterse en nuestros
artefactos para robarnos la clave, encontrar secretos, hacernos sonrojar de
alguna manera. Y alguien dirá: Nooo, ni que
fuera importante el señor, siendo un don nadie, un invisible. Ajá, me digo,
pero por qué ahora, me dicen, para solicitar la visa de los gringos uno tiene
que dar el correo, las cuentas de redes sociales y toda esa información
teóricamente privada? Aunque no es necesario, ellos ya las conocen y por eso
creo que si llego a pedirla me la negarán de entrada al confrontar todas mis
opiniones expuestas contra los gringos. Qué vaina no? Por su seguridad, usted
está siendo grabado… ja!
Pensar que puede sonar risible o paranoico, como se
quiera, pero efectivamente la vida moderna hace que uno esté expuesto en todo
momento y lugar, porque nada más ver que uno está identificado desde que sale,
usa una tarjeta para pagar el bus; a lo largo del camino lo siguen cámaras
filmadoras (pero eso sí, que lo roben a uno y las cámaras estaban dañadas o la
imagen es tan borrosa que uno aparece como ser de ultratumba, con lo bien
peinadito que había salido en la mañana); consume algo y paga con tarjeta o
saca del cajero y con el solo hecho de la salida ya espías, hacker o servicios
de inteligencia saben todo lo que uno hizo. Además saben qué programas veo, qué
páginas de internet visito, qué publico, qué me gusta y qué me disgusta. No es
ese solo hecho un motivo para volverse paranoico?
Pero bueno, en mi caso pienso: Pa’ la mierda todo! Si
me preocupara por la situación terminaría necesariamente paranoico y
efectivamente quién soy yo para preocuparme si sigo siendo un don nadie, un
invisible? (Es mi único consuelo).
Tomada de Facebook 59276235_2278522215600746_1928434668022005760_n.jpg |
[1] John Katzenbach.
Historia del loco.
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